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Tuesday, January 03, 2012

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Critica LIKE CRAZY

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Titulo: Like Crazy
Director: Drake Doremus
País: Estados Unidos.
Género: Drama
Guión: Drake Doremus, Ben York Jones
Fotografía: John Guleserian
Música: Dustin O'Halloran
Sinopsis: Anna (Felicity Jones), una joven británica que estudia en la universidad de Los Ángeles, se enamora de Jacob (Anton Yelchin), un joven norteamericano, pero ambos se ven obligados a separarse cuando a ella no le renuevan el visado estadounidense para permenecer en los EE.UU. Anna regresa a Londres, y la pareja se ve forzada a mantener una relación a distancia.
Trailer: Like Crazy



Allí donde se había soñado en compañía, resucitan dos soledades.

Cuando finaliza la proyección de Like Crazy, viene a mi mente ésta peculiar y certera frase de  Eugenio d'Ors. No creo que exista otro aforismo que refleje tan certeramente lo que intenta representar Drake Doremus en su desenlace. Multipremiada en Sundance 2011, Like Crazy, cuenta la historia de amor de dos adolescentes (Anna y Jacob) que deben separarse  y mantener su relación a distancia por motivos estrictamente legales. Estamos ante un pequeño tesoro que viene a trasmutar en realismo, tanto al género independiente cómo al romance dramático.



Aunque su argumento no resulte del todo original, lo que sí es novedoso —y de una manera sorprendente— es su rotunda sinceridad y honestidad al momento de retratar el amor de juventud (el primer gran amor, el que más duele y marca nuestras vidas) con un encanto y un magnetismo que pocas veces se ve en la gran pantalla. Like Crazy se atreve entre su aparente sencillez técnica y argumental, a proponer el realismo que otras películas nunca alcanzan a representar. Ya que si se piensa en títulos románticos a los que se les adjudica el término realismo, siempre existe en éstos, una partida y un tratamiento artificioso y superficial que juega en pro de la finalidad de la película y no en pro de la realidad. Like Crazy pierde este artilugio predominante, y se embarca en la difícil labor de adjudicar el realismo en toda la propuesta, consiguiendo milagrosamente que gran parte del público se identifique con lo que se muestra en pantalla, y mejor aún, se enamore de su exquisita sensibilidad y vulnerabilidad.

Like Crazy se dispone a contarnos lo que puede llegar a doler el amor ante la distancia y las adversidades, haciendo hincapié en el grado en que el amor puede llegar a desgastarse por razones ajenas a los involucrados. Es una película pequeña y sencilla, pero intimista, nostálgica, y como no, brillante. Además de su tratamiento argumental extremadamente sensato y seductor, cuenta con dos ingredientes más a su favor: la mágica química que existe entre sus protagonistas —tanto Felicity Jones cómo Anton Yelchiny están extraordinarios, aportando enormes dosis de naturalidad y encanto a la propuesta, realmente te crees que esos dos personajes tan diferentes están enamorados y se necesitan el uno al otro— y la extraordinaria selección musical que acompañan las escenas —lo que se escucha en Like Crazy es una de las mejores bandas sonoras adaptadas de los últimos años, todos los tracks incentivan y elevan la frescura, la credibilidad y la nostalgia que propone.

La dirección de Drake Doremus (Douchebag, 2010) me resulta un tanto irritable y digna de un principiante. Algunas secuencias y el juego del montaje, puede que repela un tanto la atención del público, pero la frescura de su elenco y del argumento, permiten que está complicación pase finalmente desapercibida.  

Puede que por momentos exagere el romanticismo o que la dirección resulte algo imperfecta, pero el increíble realismo de Like Crazy y la brutal honestidad con que es contada esta historia, permiten que su visionado resulte del todo imprescindible y nutritivo. Like Crazy viene a hablarnos de esa primera fase de enamoramiento (amor ciego), de sus diatribas y del impacto que genera en nosotros. Es una película que provoca un sinfín de sensaciones difícilmente provocadas en otras películas del género, que cuenta con un extraordinario elenco actoral y una sencillez técnica y argumental atrapante y maravillosa. Un ejemplo rotundo de  que hoy en día un filme resulta creíble e impresionante gracias a la incursión y el talento de nuevos artistas.  Fresca y nostálgica. Una pequeña maravilla.

Nota: 7.0/10

7 comentarios:

Daniel Bermeo said...

Me has dejado con muchas ganas de ver la pelicula. Habia leido cosas no tan entusiastas mas alla de la banda sonora y la interpretacion de Felicity Jones, pero tu percepcion del film me despierta interés.
Es verdad eso en el parrafo final que citas de que la inclusion de nuevos artistas dan una cuota más realista e impresionante a los trabajos que a veces pueden sonar reiterativos, lo mismo me pareció por ejemplo Blue Valentine.

Ya la conseguiré. Un abrazo.

Carlos Andrés said...

Un delicioso film, sin duda.
La disección que realiza sobre las relaciones de pareja, las consecuencias de la distancia, las confusiones, las nuevas personas, los caprichos y claro, los amores inexpertos, está muy bien logrado; resulta creíble. Sin embargo, y aparte de tener un final pasmoso, el tema daba claramente para dejar destrozado, cosa que sólo logran las películas con una verisimilitud desbordante. Evidentemente en mí no lo logró.
Obviamente, tampoco le resto méritos, que los tiene, y bastantes.
En fin, unas de las mejores propuestas indies del año; fresca, plausible y grata. Además, una de las interpretaciones a tener en cuenta; Felicity Jones: Portentosa.

Saludos.

Giancarlo Verástegui said...

Ya conoces mi opinión respecto a la película : sencillamente sublime. Quedé enganchado de la impecable performance de Felicity Jones.

Un abbraccio e tanti saluti!!!

Alejandro Salgado B. said...

Excelente, totalmente de acuerdo. Saludos

Mario Salazar said...
This comment has been removed by the author.
Mario Salazar said...

Si es tan verídica y no a favor de la película sino de la realidad habrá que verla, pequeña pero contundente; son esas películas las que terminan emocionándonos, como dice Daniel como Blue Valentine. Saludos.

Rodrigo Moral said...

Te dije que te debía un par de lecturas. Y me interesaba mucho ver qué te había parecido LIKE CRAZY, porque a mí me gustó muchísimo.
Digamos que, de la película en sí y de tu crítica, las dos palabras más destacadas son REALISMO y HONESTIDAD. No sé si son las dos que hacen de LIKE CRAZY algo distinto, pero sí dos que la convierten en algo deliberadamente bueno.

POSIBLE SPOILER:

En mi opinión, el "clic" que acerca a LIKE CRAZY a lo mejor del género es la escena en que LIKE CRAZY llora con el teléfono en la mano. Cuando terminás de ver esa escena, que no deja indiferente por el modo en que Jones se involucra en su personaje, te das cuenta de que estás frente a algo inteligente y fuerte. Tampoco llega a lo desgarrador, que era lo que esperaba. No era un dolor tortuoso como en las películas de Wong Kar Wai, pero sí un dolor adolescente que marca pero no mata.

Saludos.