Critica ZOMBIELAND

País: Estados Unidos

Director: Ruben Fleischer

Genero: Comedia

Guión: Paul Wernick, Rhett Reese

Reparto: Jesse Eisenberg, Woody Harrelson, Emma Stone, Abigail Breslin, Amber Heard, Bill Murray

Critica

Nota: 6/10

“Regla numero 32: Disfruta las pequeñas cosas”

Es una pseudo-dogma que imparte uno de los personajes en el film, y que encuentro apropiada de igual manera para definir una película como está. Zombieland va AXIOMÁTICAMENTE de Zombies que encarnan los confines de la humanidad (con algunas excepciones), o de una faceta post apocalíptica casi terminal de la raza humana. Pues bien, la premisa es bien fácil, como sucedió The Road o 28 Days Later, la raza humana esta totalmente pérdida y no hay indicios de salvación. En este caso, los humanos se han convertido en Zombies, criaturas insaciables, salvajes y sanguinarias. Pero aun así, hay pocos habitantes que no fueron infectados, y que intentan sobrevivir al entorno y situación de su nuevo hogar que ahora lleva por nombre Zombieland.  Pero si hay algo que diferencia a esta película de las antes mencionadas, es que Zombieland es una vuelta a la tuerca del género; con un humor sarcástico representante del anticlimax  (no comprensible para todas las sensibilidades), narra con agudeza la travesía de cuatros individuos muy disfuncionales, que intentan conseguir un sitio libre de Zombies. Bajo escenas sangrientas, terrenos sórdidos y violencia explicita, se levanta esta atípica comedia, que se enfoca en explorar las personalidades y peripecias de los personajes, y deja a un lado las moralinas y los antecedentes históricos. Zombieland consigue tu atención desde los primeros minutos, para llevarte por sus graciosas y curiosas incongruencias, en un ritmo argumental que aumenta a ratos sin llegar a flaquear. Las series de películas de Zombies, eran concebidas como películas clase B, pero Zombieland, no es, ni puede compararse con una cinta clase B, Zombieland nace bajo una formula que denota sutileza y que se debe apreciar, analizar y visionar, fuera del conjunto de “una mas de Zombies”. Fleischer dirige sorpresivamente con destreza esta atractiva “anomalía”. Sus notables planos, enfoques y secuencias, también alejan a Zombieland de una supuesta representación u homenaje de películas del género clase B. Su tratamiento  despreocupado -sin dar antecedentes (¿las vacas locas?) ni arrogar pistas del futuro- se sirve para manejar acertadamente la comedia, lo que hace que su visionado sea mas que agradable y divertido.  Pero algo curioso pasa con Zombieland, tras degustar de sus largos momentos graciosos y regalar mi aprecio a estos peculiares personajes, se llega a sentir que falta algo en el conjunto para que esta sea una película del todo completa. El reír y el entretenerme, son razones aceptables, para ver una película como esta, pero por su grado sobreexpuesto de despreocupación, Zombieland no explorar o profundiza las bases argumentales que ella misma plantea, hubiese sido algo acertado profundizar la historia de estos personajes y combinarla con el humor acido que profeta, pero creo que esto de lo que hablo, lo veremos próximamente en la secuela.

Un elenco atractivo, liderado a mi parecer por las actuaciones masculinas. El trabajo de Jesse Eisenberg (Columbus), es significativo y juega muy a la par de su compañero de travesía Woody Harrelson (Tallahassse), un actor que viene repitiendo el mismo trabajo desde hace años, pero que aquí -esta imposibilidad de cambio- juega a su favor, ya que el personaje parece estar escrito para él y solo para él. Abigail Breslin muy acertada aunque me esperaba mucho más de ella o de su personaje y Emma Stone sencillamente encantadora. Pero hay un personaje o mejor dicho, hay un cameo que le da velocidad, grandeza e impulso a esta película, y es la notable y espectacular aparición del gran Bill Murray. Su tiempo en pantalla son los más significativos y recordables del metraje, así que tomen sus conclusiones sobre la presencia de esta magistral actor en este largometraje.

Zombieland, o tierra de zombies, es además de esto, un viaje de carcajadas que deja un dulce sabor de boca. Notable entretenimiento.

Lo Mejor: La intervención –y muerte- de Bill Murray / Su formula que transfigura los estereotipos cinematográficos del genero y opta por ensalzar irónica acidez del conjunto / Los saltos al pasado para indagar en los antecedentes de los personajes.

Lo Peor: la inevitable sensación de vacío, tras reír en numerosos momentos con sus peripecias acidas, esperaba conocer la razón por la cual me senté en la butaca.