Critica THE COVE

País: Estados Unidos

Genero: Documental

Director: Louie Psihoyos

Guión: Mark Monroe

Reparto: Documental.

Critica

Nota: 8.5/10

“La sonrisa del delfín, es el mayor engaño de la naturaleza”, dice Richard O’Barry, mientras explica como este mamífero –gracias a su fisonomía- da la impresión de estar siempre feliz, incluso en cautiverio. Los delfines como criaturas acústicas que son, poseen un potente oído –es el principal de sus sentidos. Al estar en cautiverio, pasa sus días en un tanque, rodeado de gente gritando, y obligados a realizar sorprendentes demostraciones con fines meramente lucrativos. En estos acuarios –negocios con consumaciones estrictamente frívolas- mueren constantemente delfines, a causa del estrés que produce esta amalgama de ruidos y gritos. Richard O’Barry, fue un famoso entrenador de delfines. ¿Quién no recuerda a “Flipper”?, el mismo O’Barry se encargo de entrenar, desde el estanque de aguas saladas, en su casa, al famoso delfín y su doble. O’Barry amaba a estos delfines, y no tardo en darse cuenta, que el cautiverio era la amenaza mortal numero uno de estos mamíferos sonrientes. O’Barry tras la muerte de “Flipper” ha querido redimir su pasado y ha dedicado su vida a liberar a estos mamíferos por todo el mundo, desde Nicaragua hasta Japón, se ha escuchado su nombre. Donde haya un delfín en cautiverio, allí estará O’Barry para liberarlo, así no posea el apoyo económico y legal que se requiere. Ahora O’Barry tras una polémica vida en contra de la matanza de delfines, se ha unido al antiguo fotógrafo de National Geographic Louis Psihoyos, y un grupo real de activistas, en la misión mas arriesgada de sus vidas, que lleva por nombre “The Cove”.

“The Cove”, es solo un medio para sus realizadores, un medio que pretende sacar a la luz, sin tapujos, la escalofriante y cruda matanza de delfines en Taiji (Japón) que se intenta ocultar a la vista del mundo. El documental es por sobre todas las cosas, un arriesgado y absorbente trabajo de espionaje, que muestra las investigaciones de grupo real de activistas, que plantaron micrófonos y cámaras de alta definición, disfrazados de rocas y cámaras acuáticas sobre la flora marina, con el fin de mostrar la cruda realidad a las organizaciones mundiales pertinentes. Los realizadores recibieron amenazas y prohibiciones de la policía de estos parajes asiáticos, por lo tanto, todo este material fue filmado en secreto y de manera clandestina. El documental te revela –con imágenes impresionantes y poéticas- la excitante vida de este mamífero es su habitad natural, para aproximarse a su real motivo, revelar y denunciar con bases –imágenes escalofriantes, como están siendo asesinados mas de 23000 delfines en la gala de Taiji, en Japón.

Pero lo que sorprende considerablemente en “The Cove” es que no solo el fin y la causa son notablemente potentes, el film es en si, una pieza magnifica de la cinematografía del género, es una perfecta mezcla entre imágenes dramáticas y secuencias impresionantes, que proporcionan una gran cantidad de información, libre de manipulación y en pro de una buena causa. Una excelente música, deslumbrantes imágenes y un ritmo constante convierten a “The Cove” no solo en un documental exitoso sino en una composición artística distinguible.

Es verdaderamente notorio, como se cubren todas las interrogantes del tema tratado, como por ejemplo: como explicar ¿porque un grupo de americanos que matan vacas y se las comen, vienen a Japón a impedir que se alimenten los habitantes? ¿Por qué y bajo que fines esta realidad ha sido ocultada durante tanto tiempo? ¿Cómo alimentando a los niños en Japón, los están enviando a la tumba?, estas y otras interrogantes tienen sus respuestas en “The Cove”, animo a todos los lectores a visionar esta estupenda pieza documental, porque si hay que ver un documental este 2010, indudablemente ese debe ser “The Cove”. Inquietante e inteligente. Lo Mejor: Con bases reales te mantienen inerte durante todo el metraje como si se tratara de un Thriller penetrante.Lo Peor: Exceso de acusaciones, casi de modo jocosas hacia la población de Taiji, -aunque no es para menos.